Encontrarte



Has deseado encontrarte por años.

Tu padre te encuentra tomando una cerveza  y te comenta que hay pendientes en casa, súbete al automovil. Él maneja.

Tú nunca tomas cerveza, curioso que él no se haya dado cuenta.

Tú tomando el café terminas de leer un parrafo al cual le dedicas segundos de tu pensamiento. Intentas deshilacharlo, remendarlo, acomodarlo a tus medidas de cintura y el largo de tus brazos.

Decides no terminar el café y visitar a tus padres.

Tu abres la puerta.

Tu sentado en el sofá, tomando el café exactamente como tu lo haces.

Tus hermanas sospechaban desde un principio, pero no se atrevían comentarlo frente  a tu padre que actuaba con toda soltura contigo.

Tus ojos. Sus ojos, tuyos.